jueves, 10 de junio de 2010

Allí moriría

Elegiría mi muerte,
En pleno vuelo,
Caída libre en el abismo del desconsuelo,
En la saciedad emplumada del sueño,
Ejercitando el odio,
Haciéndolo de mí,
Agigantando la furia
La sombra del ego.

Elegiría mi muerte,
En salto al todo,
Enredado en enjambre de recuerdos,
En los colores de tu olor,
Arrasado por la tempestad de tu sexo,
En tu boca mora
En tus tetas.

Elegiría mi muerte,
Desesperado por la vida,
Imantado a ella,
En una extrañeza atónita,
Despiadado con la certeza,
En la última batalla contra la puta de lo posible,
Abriendo la pregunta.

Elegiría mi muerte
A mi solo me seguí,
Entre dialecto narcóticos y
un peso torciéndome las espaldas
como siendo el personaje
fugitivo de las letras,
como vomitado contra destino,
me seguí como al demiurgo
de un yo imprevisible,

pero elegiría mi muerte,
Hurgando entre tus sienes,
recluido en tu vientre,
en la fractura del silencio
en tu voz mujer…
en tu decir rebelión,
hundido en tu fiebre,
allí moriría.