jueves, 5 de mayo de 2011

Sin nombre 9


El apagón

hijo prodigo de la oscuridad

me deja ciego,

siento la tibieza del sol

de la luz nada se,

nunca supe nada,

me arrastre entre las sombras

que paría mi locura

por eso soy tan blanco

por eso siempre adore la filosofía

del desfiladero,

de la cornisa encallada en los pasos

al vació,

y ahora creo que

este fulgor de vida

sabe rancio,

a enmohecido,

como una carta olvidada en una manga

que no es mía,

como el cuento de alguien más,

el apagón nuevamente

el desfiladero,

la sangre,

el abismo

mi vida hecha muerte,

mi muerte hecha raíz de vida,

con la angustia entre los dientes me respeto,

sin ella solo soy una foto,

un genocidio

desinteresado…

un olvido,

una parodia mal narrada,

que voy hacer si le temo

a la luz.

4 comentarios:

  1. Escalofriantemente bueno, Emiliano!!!

    Abrazo
    J&R

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  2. Emiliano:las mariposas buscan la luz y con su aleteo, a veces provocan cambios en la naturaleza, si le tememos a la luz sólo hay un trayecto, enfrentarla y transformarnos en ella...

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  3. es acertado temerle a la luz, no creo que haya que hacer nada al respecto, vivir como bicho bolita entre las sombras es lo que más me gusta,
    buen relato Emiliano! graciasss, me encantan!

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  4. Al leerte tengo la impresión de que hablas de tu propio sentimiento mirándolo desde fuera.
    Como si durante un sueño hubieras trascendido de ti y te encontraras con tus infiernos.
    Eres un placer para los sentidos, Emiliano.
    Un beso.

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